“Se apoderaron de los ahorros de todala vida”

El Canciller de Cuba, Sr. Felipe Pérez Roque, en conferencia de prensa el 9 de abril, ofreció por primera vez información sobre los juicios sumarísimos a 75 pacíficos activistas de derechos humanos, periodistas y economistas independientes, y pacíficos opositores, efectuados del 3 al 7 de abril.

Las detenciones comenzaron el 18 de marzo, y sólo entonces se comunicó a la población en escueta nota de prensa, que se estaba apresando a varias decenas de disidentes.

El Canciller manifestó que todos los acusados conocieron con anticipación los cargos, tuvieron derecho a nombrar abogados, y ser escuchados en los juicios.

Recordamos que estos procedimientos se efectuaron con pocas horas de anticipación.

La petición fiscal fue entregada a los acusados en los lugares de internamiento, y pudieron darla a los familiares en las visitas previamente programadas. Por tanto, apenas contaron con tiempo suficiente para nombrar los abogados.

Esos defensores debieron estudiarse los sumarios y prepararse precipitadamente, lo que no permitió, en la mayoría de los casos, poder visitar a los acusados en las prisiones.

Tuvieron que conversar con ellos únicamente unos minutos antes de iniciarse los juicios. Evidentemente, la premura imposibilitó presentar testigos de la defensa.

Sin embargo, los fiscales contaron con más de 10 días para preparar sus acusaciones. Cada juicio duró entre18 y 6 horas.

Aproximadamente dos días después, las sentencias fueron entregadas a los familiares en los Tribunales Provinciales, y no a los acusados personalmente en la corte.

La mayoría de las declaraciones de los inculpados fueron desestimadas, según consta en esos documentos.

El ministro señaló que las vistas habían sido públicas y, que el promedio de participantes era de 100
personas por juicio.

Sí, las salas estaban llenas de desconocidos convocados por el Gobierno, previsiblemente miembros de los Comités de Defensa de la Revolución, el Partido Comunista, la Seguridad de Estado, y otros. A
las amistades y vecinos de los prisioneros no se les permitió entrar.

En cuanto a los familiares, fueron limitados. Al hijo mayor de Pedro Pablo Alvarez se le impidió
el acceso, así como a dos sobrinas de Oscar Espinosa Chepe.

Ellos permanecieron en las aceras de los Tribunales respectivos, alejados por los agentes de la Seguridad del Estado y la Policía.

Los testigos de la Fiscalía resultaron, por lo general, personas que identificaban con dificultad a los acusados, y sus inculpaciones fueron insustanciales.

Por ejemplo, algunos decían haber visto a los acusados conversando con congresistas, senadores y otras personalidades norteamericanas, pero no habían escuchado lo hablado o no entendían el
inglés.

La mayoría de los acusados tampoco dominan ese idioma. De tal suerte que ellos se expresaban en cubano castizo y, en no pocas ocasiones, yo traduje las conversaciones.

El Sr. Pérez Roque se refirió a las cantidades de dinero recibidas a través de la Agencia Transcard, la cual funciona mediante los bancos del gobierno de Cuba.

Aplican Ley Mordaza retroactivamente a Hector Maseda

Jaime Leygonier, CubaPress. La HABANA, 14 de abril de 2003 – En el juicio al científico y académico distinguido Héctor Fernando Maseda Gutiérrez, de 60 años de edad, la fiscal fundó su petición de 20 años de prisión, entre otros hechos, en que Maseda fue uno de los autores de una carta a los inversionistas extranjeros.

El acusado aclaró que publicó esa carta en 1998 y que la ley 88 fue aprobada en 1999, demostrando con esto que la fiscal erraba al calificar la carta como delito, pues aplicaba la ley 88 con carácter retroactivo.

No obstante, la fiscal ratificó su petición de 20 años de prisión y esa fue la sentencia del tribunal, según informaron familiares de Héctor Maseda.

La familia del prisionero de conciencia Héctor Maseda afirma que el abogado defensor, Lic.

Alarcón solo tuvo acceso al expediente de la causa el día anterior al juicio, y solamente se entrevistó con su defendido minutos antes de la vista oral.

Durante esta, el defensor alegó que los miembros del Partido Liberal Democrático, del cual es vicepresidente Maseda, habían solicitado al Ministerio de Justicia la inscripción como asociación legal, según prescribe la ley de asociaciones y como el Ministerio de Justicia no dió respuesta negativa, y que las reuniones de dicho Partido podían ser consideradas por Maseda y sus participantes, como amparadas legalmente.

Alegó también que no recibían órdenes ni dinero de potencias extranjeras y aunque solicitaron cambios políticos, no incitaban a subvertir el orden, pero el abogado omitió el importante hecho de que aplicaban de forma retroactiva la ley 88, y fue el propio acusado Maseda, quien tuvo que subsanar la omisión, explicando este acto antijurídico.

Además, mientras los abogados defensores de otros acusados demandaron disminución de las condenas, cambio a prisión domiciliaria y hasta la absolución, el defensor de Maseda no concretó propuesta alguna y se limitó a solicitar que la condena no fuera tan severa.

En el recurso de apelación de la sentencia, una abogada alega este aspecto de la aplicación retroactiva de la ley y que a los mayores de 60 años de edad le es disminuido por ley, un tercio de la condena.

LA HABANA, abril – Cuando el 19 de marzo de 2003, entre las 5:30 y 5:45 de la tarde abrí la puerta de mi casa a la policía política, supe que mi familia iba a ser cercenada y mi hijito de 9 años condenado a sufrir vejaciones.

Esa tarde será inolvidable para nosotros, y sobre todo para nuestro hijo. Mi esposo, Manuel Vázquez Portal, y yo estábamos en el cuarto conversando cuando llamaron a la puerta. No fueron toques fuertes, más bien mesurados, lo que se contradice con el despliegue policíaco que hicieron al llegar al edificio los agentes de la Seguridad del Estado, según me contaron los vecinos.

Muchos de ellos me comentaron que parecía que iban a capturar a Bin Laden: tres carros, dos motos.

Catorce hombres subieron a mi apartamento con cámaras fotográficas, de video y otros artefactos propios e impropios de lo que se proponían realizar, todos vestidos de civil.

El responsable del “operativo” me metió un papel por los ojos y terminó de empujar la puerta que yo sólo había abierto a medias.

Me siguieron hasta el cuarto donde estaba Manuel y le mostraron la orden de registro.

A partir de ese momento se dividieron en cuatro bandos, uno con Manuel en la habitación donde escribía, otro conmigo en el otro dormitorio, un grupo estaba en la sala con el jefe, quien se sentó a nuestra mesa a recopilar las “evidencias” y un último bando que entraba y salía de la casa
sin cesar.

Denuncian la situación por la que atraviesa Víctor Rolando Arroyo Carmona

A las 11 de la mañana del jueves 15 de mayo del 2003, recibimos la visita del General Calderín, Jefe Nacional de Cárceles y Prisones con un séquito numeroso.

Fueron directamente a la celda de castigo #4, donde se encontraba el prisionero de conciencia y miembro de La Comisión de Relatoría de Todos Unidos, Víctor Rolando Arroyo Carmona y querían que éste se parara en atención.

Arroyo quien estaba sentado estudiando se puso de pie y le dijo que él no era militar. El general visitó a cada uno de los prisioneros de conciencia y nadie se puso en atención.
Cuando se retiró el militar, regresó uno con el grado de Mayor y ordenó al patriota Arroyo que recogiera su colchón, aseo personal y lo acompañara.

Se lo llevaron para otra área de celdas de castigo mucho más severas que estas pero que desconocemos el rigor de las mismas.

Hoy 26 de mayo, no lo han reintegrado al grupo y solo supimos que su presión arterial la temía alta según nos refirió un oficial el día 17.

Estamos atravesando una crítica situación en esta Prisión Combinado de Guantánamo. Desde el día de Las Madres, 11 de mayo, en que nos ubicaron en este aislamiento, no hemos recibido sol hasta el momento de redactar esta nota, día 26 de mayo.

No hay regularidad con el periódico. El agua que es bombeada desde el río es imposible de tomar por su contaminación. El mosquito, hay por millones. No tenemos acceso a la televisión.

Nuestra correspondencia es censurada. La comida mal oliente la mayor parte de los días y las visitas cada tres meses. Pero nuestra moral altísima
no cederemos ni un milímetro. Agradecemos todo lo que se ha hecho y se hace por nosotros. Y que aumenten las presiones contra el gobierno de Fidel Castro.

Félix Navarro Rodríguez

Área de Celdas de Castigo del Combinado de Guantánamo.
Esta denuncia fue leída vía telefónica por Saylí Navarro, hija de Félix Navarro Rodríguez en PRIMERA PLANA, Revista Noticiosa de la Poderosa 670 AM, el 28 de mayo
del 2003. Gr

Ocuparon dibujos infantiles a pedagogo independiente

Anna Rosa Veitía, UPECI. LA HABANA, 20 de marzo 2003 – Roberto de Miranda, Presidente del Colegio de Pedagogos Independientes de Cuba, fue víctima el pasado 18 de marzo de un registro domiciliario que se prolongó desde las dos de la tarde hasta la una y treinta de la madrugada.

El registro culminó con el arresto del opositor.

El hijo de Miranda expresó su preocupación porque su madre y esposa del pedagogo se encontraba hospitalizada en el momento del registro y posterior arresto, con una fuerte crisis de asma.

Al enterarse de los hechos acaecidos en su hogar, se quitó los sueros y abandonó el hospital. Al Presidente del Colegio de Pedagogos Independientes le fueron confiscados libros, documentos
y los dibujos de un concurso en el que participaron decenas de niños de su localidad.

Por otra parte, en Pedro Betancourt, municipio de la provincia Matanzas, el operativo policial llevado a cabo en esa localidad tuvo también su tono dramático, debido a que cuando los agentes de la policía política se personaron en la sede del movimiento independentista Opción Alternativa, que dirige Ariel Sigler Amaya (quien fue detenido junto a sus hermanos Guido y Miguel) la señora Gloria Amaya, de 71 años, madre de los hermanos, sufrió un ataque de hipertensión arterial, y tuvo que ser hospitalizada para brindarle cuidados especiales.

Más de 30 agentes en el registro de Héctor Palacios

y Gisela Delgado

Fara Armenteros y Ernesto Roque, UPECI. LA HABANA, 21 de marzo 2003 – A escasos minutos de terminado el registro en su domicilio, Gisela Delgado Sablón, directora ejecutiva del Proyecto de Bibliotecas Independientes, informó que su esposo, Héctor Palacios Ruiz, había sido conducido al cuartel general de la Seguridad del Estado, Villa Marista.

“En el registro participaron más de 30 efectivos militares, y para transportar toda la literatura confiscada utilizaron dos paneles y dos autos Lada, dejando una cantidad considerable “en depósito”, señaló Delgado
Sablón.

Añadió la bibliotecaria independiente que los agentes confiscaron también medicamentos, cassettes y materiales de oficina, y comentó que esta escalada represiva hace más daño al gobierno que a los propios disidentes, dado que en el actual escenario económico y social, el Estado no tiene creadas condiciones para dar solución inmediata a las necesidades de la población.”

Al surgimiento y fortalecimiento de la sociedad civil en Cuba han respondido las autoridades gubernamentales con la ola de detenciones que se realizan”, concluyó Delgado.

Fara Armenteros, UPECI. LA HABANA, 24 de marzo

Como parte de la escalada represiva iniciada el 18 de marzo pasado, fue allanado el consultorio médico independiente que auspiciaba el movimiento Opción Alternativa en Pedro Betancourt, Matanzas.

Josefa López Peña, enfermera que atendía el consultorio, informó a esta agencia que la policía política decomisó en el asalto unas 90 libras de medicamentos, entre los cuales se encontraban antibióticos,
analgésicos y vitaminas.

La policía se apoderó también de un aparato para administrar aerosol, otro de oxígeno con vibrador, un glucómetro, el equipo de fisioterapia e instrumental para aplicar inyecciones y efectuar curaciones.

“Se llevaron también las medicinas de mi hija y de mi esposo, y nos dejaron sin un centavo. Cuando reclamé, me dijeron que lo hiciera a Seguridad del Estado”, dijo López Peña.

Treinta policías uniformados y 25 agentes de Seguridad del Estado participaron en el operativo, informó López Peña, además de cien miembros de las paramilitares Brigadas de Respuesta Rápida, quienes coreaban consignas políticas y nos insultaron.

“No encontraron eco en la población”, afirmó. El consultorio médico independiente de Pedro Betancourt atendía gratuitamente a los residentes de la zona, y les entregaba también gratuitamente las medicinas recetadas por los médicos del sistema de salud gubernamental, que no se pueden adquirir en las farmacias asignadas a la población.

“Una mujer policía me hizo un registro personal a la fuerza, y tengo arañazos en los brazos y hematomas en la espalda.

Todo el violento operativo se desarrolló delante de los niños de la familia y de mi suegra, una anciana de 71 años muy delicada, a quien también le decomisaron el poco dinero que recibe de pensión”, concluyó López Peña.La biblioteca del movimiento Opción Alternativa también fue decomisada, así como fotos y documentos.

Tres miembros de esta familia, los hermanos Ariel, Guido y Miguel Sigler Amaya fueron encarcelados.

Sociedad de Periodistas Manuel Márquez Sterling

Decíamos en nuestro primer número que revistas como estas son una necesidad nacional.

Nunca ha sido tan cierto.

Los cubanos estamos sufriendo la mayor ola de represión padecida en los últimos diez años. El gobierno se ha empeñado en no permitir que las voces que disienten de la línea oficial encuentren un espacio en la sociedad cubana actual.

Durante las negras semanas de marzo, la policía política encarceló a más de setenta opositores pacíficos y periodistas independientes, incluyendo a destacados profesionales de la información ligados a esta revista.

En abril, fueron condenados mediante juicios sumarísimos a penas que alcanzaron los 28 años de privación de libertad. Cuba es hoy la mayor cárcel de periodistas del
mundo.

La condena internacional a los encarcelamientos y al fusilamiento de los tres jóvenes que intentaban llevarse una lancha al Estrecho de la Florida no ha tenido precedentes.

Parlamentos, partidos políticos de todas las ideologías, dirigentes religiosos, medios de comunicación, intelectuales, artistas y ciudadanos de a pie de todo el mundo han manifestado su repulsa a la ola represiva.

Hasta los escasos amigos de siempre, como Saramago y García Márquez marcaron sus diferencias. El primero, dijo sentirse profundamente decepcionado y se baja del tren de esta revolución.

Al segundo, las indignadas críticas de varios intelectuales de renombre como Susan Sontag, lo obligaron a condenar la pena de muerte, también en Cuba.

En este número daremos a conocer al pueblo cubano cómo se realizaron los registros por parte de la Seguridad del Estado.

Las confiscaciones de libros, computadoras, faxes, máquinas de escribir que constituían los medios de trabajo de gran parte de los

opositores y periodistas, y de los cuáles el lector nunca tuvo conocimiento a través de la prensa nacional.

Además, no faltan en esta edición, los testimonios de los familiares que sufrieron el allanamiento de sus hogares y la humillación de ver cómo arrestaban a sus seres queridos por el “delito” de escribir libremente, y por exigir, en palabras de Martí, “su derecho a pensar y a hablar sin hipocresía”.
La represión fue un duro golpe pero no amilanó el deseo de informar a nuestro pueblo.

Han condenado a muchos periodistas pero quedamos otros, y aunque nos encarcelen a nosotros, otros vendrán a relevarnos tomando en sus manos la antorcha de la libertad de prensa.

Todo pueblo tiene derecho a estar informado y a emitir libremente sus opiniones sobre las informaciones que recibe de los medios de comunicación. Ejerza, amigo lector, ese derecho inalienable que es opinar según le dicte su conciencia.

La libertad no la otorga ni la suprime ningún gobierno. Es un sentimiento personal, que se ejerce, aún tras las rejas. La revista De Cuba se complace en
ser un grano de arena para contribuir al ejercicio de ese derecho